martes, 29 de enero de 2008

Optimismo

Casi como regalar felicidad es regalar optimismo, y eso voy a intentar hacer.

Este optimismo con el que he empezado el año. Este optimismo que me lleva a pensar que este va a ser un gran año, ademas del primero de muchos buenos. Este optimismo que tanto necesito compartir con vosotros.

No es una idea mía aquella de regalar un pequeño obsequio a quien me deje un comentario en esta entrada. Sin embargo no puedo evitar apropiármela con el fin de haceros un regalo. Por ello voy a mandar, en el menor tiempo posible, chapas de optimismo a todo aquel que me deje un comentario en esta entrada. Y por supuesto me mande su dirección postal por correo electrónico.

No lo dudéis, y haced que corra la voz.



Las chapas del optimismo son una idea de Red Seifer y podéis comprarle a el las chapas en su web.

No creo que exista una canción mas adecuada para esta entrada.


sábado, 26 de enero de 2008

Out of time

Esta es mi canción favorita. Se titula "Out of time" y es de Blur de su disco "Think Tank". El vídeo hay que verlo completo para que tenga sentido.



Por supuesto también os dejo la letra

viernes, 25 de enero de 2008

Cuentos diarios.

Otra vez comienzo una entrada disculpándome por lo que tardo en escribir. Me cuentan que así se pierde el interés. Y pienso que para perder algo en algún momento has habido de tenerlo. Por tanto si lo has perdido muchas gracias por haberlo tenido, y se lees esto, muchas mas, por haberlo guardado.

Hoy me he dado cuenta de lo mucho que me gusta bajar andando a casa desde el trabajo. Mas en días como hoy, un soleado día de invierno. Después de varias jornadas de nieblas por fin Lorenzo ha decidido desperezarse y brindarnos su mejor cara. Cuanto disfruto mirándole, mientras tengo que entrecerrar los ojos, mientras recibo ese calorcillo en la cara.

Últimamente siempre vuelvo mas o menos a la misma hora, con lo que muchas de las personas con las que me cruzo se repiten día tras día, y es curioso como se transforman de ser simple gente, a tener una identidad propia. Entre ellos recuerdo a un grupo de pequeños yuppies, cuatro si no me equivoco, de los cuales uno lleva una especie de corte de pelo estilo cacerolo, los cuales me recuerdan muchísimo a una nueva versión de Frodo y sus amigos. (Imaginaos al pobre Golum amenazado por una auditoria)

Otro personaje que llama mi atención es una señora con el pelo azul, que periódicamente veo pasar en una bicicleta antigua. Quizás sea una musa, con años de experiencia, que lleva la inspiración a algún escritor, que como yo, pasa por un momento de vació argumental. O a lo mejor pertenece a algún tipo de hermandad o club relacionado con el color del cielo, y esta intentando dejarme un mensaje. No lo se, la seguiré observando.

Os podría hablar de mas congéneres viandantes, sin embargo tengo la sensación de que últimamente las entradas se me quedan muy largas, y esto no favorece al señor interés. Aun así no me reprimo de invitaros a asignar historias a vuestros compañeros en el viaje diario, quizás así descubráis un príncipe azul, que cada día coge el autobús para ver a su princesa.

Felices cuentos.

miércoles, 9 de enero de 2008

Tránsitos (V)

Llorar deja de tener sentido si nadie te pone una mano en el hombro, si nadie te da un abrazo, y te dice que todo volverá a ir bien. Hasta que no caí en la cuenta de este hecho no cesaron las lagrimas.

Sin abrir los ojos busque el apoyo de la pared sobre mi espalda. Aun sentado, y ya calmado, pensé en reordenar mis ideas. Después de lo sucedido al intentar asomarme al interior del edificio, no sabia si debía huir, si debía esperar, quizás gritar. Ahora el ambiente parecía tranquilo.

Entonces comencé a abrir los ojos. Cuando la luz llego a ellos después de largo tiempo, estos se quejaron con un dolor agudo.

Una vez empezaron a acostumbrarse a la luz, y el dolor remitió. Comencé a ver los primeros colores. En ese instante una mano se poso en mi brazo derecho y una voz me dijo:

-Tranquilo. Todo esta bien.

Sobresaltado, aunque la voz me trasmitía una extraña tranquilidad, me frote los ojos para intentar recuperar la vista lo mas rápido posible. Entonces otra voz, o la misma, pero procedente de mi izquierda, le rebatió:

-¿Como que tranquilo? Que dices tranquilo. Tiene mas prisa que nunca, ha de salir de aquí cuanto antes.

Mi ceño fruncido y yo no cabíamos en la sorpresa. Tenia sentadas a cada uno de mis lados dos personas idénticas, que ademas presentaban un aire muy parecido al hombre que cerro las barreras.

-Si, estate tranquilo. aquí esperando. El tren volverá. Ya veras. Te lo digo yo.
-Ya estamos con la misma farsa de siempre, que si el volverá, que no puede haberse ido muy lejos, que se habrá perdido pero encontrara el camino de vuelta.

Asistía impávido a una conversación que me tenia como protagonista. Estas dos personas semejaban saber mas de mi, que yo mismo.

-Sabes que no miento, algo que se va de un día para otro, no es para no volver. Ademas ya sabes la cantidad de viajes que había planeados.
-No, lo que tienes que hacer es exactamente es eso, dejar de mentirle. De sobras sabemos que no hay vuelta atrás.
-Y si la hay...
-No la va a haber, porque nunca seria el mismo viaje.

No acertaba a meter una frase. Mi cabeza se giraba de un interlocutor a otro como un péndulo. De pronto el hombre de la derecha aumento el volumen.

-¡No es así! Esperara lo que sea necesario, por que volverá. No nos moveremos de aquí para que pueda encontrarnos.

A esto el individuo de mi izquierda se puso en pie, y con amplios aspavientos de brazos le respondió.

-¡Mierda!¿Que mierda estas pensando? Acaso quieres que malgaste su vida esperando algo que no volverá. ¡Tiene que salir de aquí!

Después de esta respuesta la discusión transcurrio de pie, dado que la ultima frase hizo que la derecha se incorporara dando un respingo.

-¡Y que si quiere seguir esperando! Cuando algo lo llevas dentro puede merecer la pena gastar tu vida en ello.
-¡No digas tonterías! No comprendes que lo que dices no tiene sentido.
-Los hechos tal y como yo los veo, no han de tener sentido.
-!Ese es tu problema, nos llevas a caminos incomprensibles¡
-¡Sin mi nunca habrías sido tan feliz como los has sido!

Justo en el momento en que parecía que iba a llegar mas allá de los meros reproches. Decidí introducir un intento de apaciguar los ánimos. Siquiera levante la mano e intente abrir la boca. Cuando ambos se volvieron y me espetaron al unisono.

-¡TU CALLA!¡HARÁS LO QUE SE TE DIGA Y NADA MAS!

Semejante respuesta hizo que mi culo cayera otra vez al suelo. Anodado contemple la conversación durante un par de minutos mas. Los reproches mutuos eran interminables y aquello parecía que nunca a acabar en un acuerdo. Visto esto me escabullí a gatas, esperando que en el calor de la contienda no se apreciara mi ausencia.

Y así fue, ganados uno metros me incorpore, y corrí hasta el lateral buscando refugio a sus miradas. Poco tiempo después, y con la respiración aun alborotada por la carrera, mire para saber si se habían percatado de mi desaparición. Despacio, me asome por el perfil del edificio...

...Y allí no había nadie.